Carlos Sanchez Berzain Abogado | Estadista | Político | Politólogo
Carlos Sánchez Berzaín entrevistado por Aminta Ramírez: El eje de confrontación en las Américas es el crimen organizado representado por el Socialismo del Siglo XXI o castrochavismo vs. la libertad y la democracia. En ese eje de confrontación hay un problema muy serio: Mientras las dictaduras actúan con metodología, la defensa de la democracia enfrenta problemas como la falsificación de la oposición u oposición funcional que existe en Cuba, Venezuela, Bolivia y Nicaragua.
Además, la oposición a estos regímenes dictatoriales que han convertido sus países en narcoestados, tiene el gran problema que no tiene unidad y enfrenta una gran división alentada por las dictaduras.
La oposición es una sola, pero en las dictaduras la oposición está presa, perseguida o exiliada. El objetivo principal de la oposición debe ser cesar la dictadura y eso tiene que ser un proyecto nacional
Hay una serie de instrumentos que los gobiernos democráticos no están cumpliendo para terminar con las dictaduras como: la Carta de las Naciones Unidas, La Carta de la Organización de Estados Americanos, la Carta Democrática Interamericana, el Estatuto de Roma, La Convención de Palermo contra el Crimen Organizado Internacional, EL TIAR, la Convención Interamericana de Derechos Humanos.
Las dictaduras son creadores de miseria, basta ver Cuba, Venezuela Bolivia y Nicaragua. Las dictaduras tienen un triple negocio con la migración: producen miseria y amenazan la libertad para que la gente se vaya. La gente se va y la utilizan como instrumento de agresión contra las democracias que están afectando sus economías que no están preparadas para recibir tanta gente. Cuando la gente forzada a migrar envía remesas a sus países que se transforma un ingreso para las dictaduras.
Ortega está liquidando la economía de Nicaragua, sus relaciones a nivel internacional son criminales. La resistencia civil del pueblo nicaragüense es creciente, y deben persistir en la defensa de la libertad y la democracia.
No se puede unir la oposición funcional con la oposición de verdad. La oposición funcional va a caer con la dictadura. Se necesita una unidad existencial, nacional, unidad que no es ideológica sino programática, una unidad que entienda que se trata del crimen organizado contra la libertad y democracia. No hay ambición política que se pueda concretar en un ambiente de dictadura donde todos están perseguidos y amenazados, se debe recuperar las condiciones de democracia y para luego poder competir en democracia.
Cabe recordar que la Declaración Universal de los Derechos Humanos se establece que es importante crear un sistema que garantice el respeto a los derechos humanos para que el ser humano no se vea compelido al supremo recurso de la rebelión contra la tiranía y la opresión.