(Diario Las Américas) MIAMI.- Por la entrevista realizada a José María Aznar por Manuel Aguilera en DIARIO LAS AMÉRICAS el 23 de febrero de este año, el partido político español Podemos liderado por Pablo Iglesias ha demandado al entrevistado pidiendo “retractación y 100.00 euros” por “daños morales”. La ventaja política que Podemos busca con esta demanda en el proceso electoral español, se convertirá en suicidio si -como todo indica- se plantea la exceptio veritatis.
Al contestar la sexta pregunta de la entrevista en Miami, el expresidente de España expresó que “Podemos es un movimiento político que defiende modelos totalmente totalitarios y postulados populistas y que ha sido financiado, al igual que sus dirigentes, por el régimen del chavismo”. Este es el párrafo base del juicio por injuria.
La injuria es un delito contra el honor tipificado junto con la calumnia en el Título XII del Código Penal español, que señala: “Es injuria la acción o expresión que lesionan la dignidad de otra persona, menoscabo de su fama o atentado contra sus propia estimación”. Esto representa que Podemos y sus dirigentes consideran que la declaración de haber sido financiados por el régimen chavista es una vergüenza (no una mentira) que lesiona su dignidad y fama; quiere decir que lo vinculado a Hugo Chávez, su Gobierno y su dictadura (subsistente en Venezuela a cargo de Nicolás Maduro) los daña en su mérito y su condición, que les da mala fama y los desacredita. Por eso demandan, confesando que vincularlos con el chavismo es malo, negativo y vergonzoso, y que -mas allá del financiamiento- repudian, reniegan y censuran al “régimen del chavismo”.
La exceptio veritatis es la “excepción de verdad”. Es la alegación por la que el demandado expresa que simplemente ha dicho la verdad, que sostiene algo que no se puede negar racionalmente. En el derecho comparado, la legislación y la justicia españolas son consideradas de tendencia amplia y abierta a la exceptio veritatis.
El planteamiento de la exceptio veritatis dará lugar a que los demandantes, judicialmente y en un momento políticamente muy interesante, puedan mostrar la procedencia de los recursos con los que impulsaron, organizaron y sostienen Podemos y la razón por la que acuden a los tribunales de justicia para tratar de castigar y censurar una opinión política. La represión judicial de la opinión política está institucionalizada en Cuba, Venezuela, Ecuador, Bolivia y otros países de la órbita chavista agrupados en el socialismo del siglo XXI.
En Podemos dicen que el partido no fue financiado por el chavismo porque se fundó en enero de 2014 y los dineros que sus promotores y dirigentes pudieron percibir del régimen chavista fueron anteriores a esa fecha. En cuanto al significado, no olvidar que “financiar” es “aportar dinero para una empresa” y que siendo Podemos tal emprendimiento, los aportes se hacen lógicamente antes del nacimiento de la entidad, para la creación e impulso del proyecto, sin olvidar de donde viene el dinero de los promotores.
El diario español El Economista escribió que los dos principales líderes de Podemos habrían recibido cerca de 1,5 millones de euros desde 2013 en que se preparaba el lanzamiento del partido a través de la CEPS. Que además entre 2002 y 2012, los gobiernos de Hugo Chávez y Rafael Correa pagaron 3,7 millones de euros al CEPS. Más grave aún es la denuncia que el dictador Maduro en Venezuela ha dirigido la represión y encarcelado líderes de oposición que sostuvieron y documentaron el financiamiento chavista para Podemos.
¿Existiría Podemos en España sin los recursos recibidos por su promotores y dirigentes del régimen chavista? El alcance del “régimen chavista” abarca la estructura no democrática que comprende los gobiernos de Cuba, Ecuador, Bolivia y Nicaragua, además de la influencia lograda por Chávez con el dinero venezolano sobre los países del Petrocaribe y la Argentina de los Kirchner.
La verdad de un “hecho notorio” como el sostenido por el ex presidente español está respaldada por confesiones de los demandantes, documentos, noticias, comentarios, columnas, datos y millones de testigos. Así las cosas, la demanda de Podemos contra Aznar puede ser el escenario donde los que van por lana saldrán trasquilados. Es cosa de la exceptio veritatis, ¡sólo la verdad!