Carlos Sánchez Berzaín entrevistado por Miguel Rivadeneira en «Democracia Tv»: El eje de confrontación en las Américas es dictaduras contra democracia. las dictaduras tienen de jefe a Cuba y están integradas por Venezuela, Nicaragua y Bolivia y tienen apoyo de gobiernos paradictatoriales como el de Fernández – Kirchner en Argentina, López Obrador desde México, estuvo Castillo en Perú, que ya cesó por el autogolpe que realizó; Boric de Chile que señala las violaciones de derechos humanos en las dictaduras de Nicaragua y Venezuela pero ignora las de Cuba y Bolivia y el último es Lula en Brasil que ha puesto toda la política exterior de su país al servicio de las dictaduras.
En ese escenario el Ecuador está yendo a unas elecciones luego de la «muerte cruzada» que está marcada por la disputa entre el correísmo que es parte del castrochavismo vs. opciones democráticas.
Los candidatos del correísmo castrochavista buscan recuperar el poder para repetir en Ecuador lo que han hecho en Brasil que no es otra cosa que sacar a Lula de la cárcel, y en el este caso lo que harían con Correa es darle algún tipo de amnistía para extinguir la pena ejecutoriada de 8 años por corrupción, cosa que sería funesta para el futuro del Ecuador.
El proyecto estatista, corrupto, lo que hace es eliminar la propiedad privada, convierte a los ciudadanos en siervos y al hacerlo pueden hacer lo que hoy en día practica Cuba, el sistema de esclavismo en el siglo XXI en el cual alquilan médicos a México, en África, pero además alquilan fuerza armada, lo que están preparando en este momento para darle a Rusia en su invasión a Ucrania.
Cuba recibe 3 mil millones de dólares al año de las remesas que los cubanos mandan desde el mundo libre, siendo su principal fuente Estados Unidos. Venezuela recibe 5 mil millones de dólares en remesas, y el dictador de Bolivia acaba de celebrar que Bolivia ha recibido cerca de 500 millones de dólares en remesas presentando eso como si fuera un gran éxito, cuando es el resultado de la expulsión de ciudadanos, de la persecución y de la ausencia de condiciones de libertad. Lo mismo pasa en Nicaragua.
El cuento de las sanciones es otra narrativa. Si algo hay que reclamarles a los países democráticos es que no están siendo eficientes en ayudar a los pueblos de Cuba, Venezuela, Bolivia y Nicaragua en la resistencia civil y en el proceso de liberación que emprenden frente a las dictaduras.
El Ecuador vive un sostenido ataque del castrochavismo en manos del correísmo para terminar con el gobierno de Lasso, ayudado por el mismo gobierno de Lasso.
El correísmo en el Ecuador representa las ordenes que vienen desde Cuba para controlar las Américas y representa la metodología para rescatar a un reo condenado a 8 años por corrupción, que es Rafael Correa y lo reincorpore a la vida política para que reinstale la dictadura por la cual el Ecuador ya pasó, donde había presos políticos, tortura, sabatinas, confiscación de bienes.