Bolivia es una dictadura y la oposición real debe señalarla así.

 

En Bolivia no existe ninguno de los elementos esenciales de la democracia que son “entre otros, el respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales; el acceso al poder y su ejercicio con sujeción al estado de derecho; la celebración de elecciones periódicas, libres, justas y basadas en el sufragio universal y secreto como expresión de la soberanía del pueblo; el régimen plural de partidos y organizaciones políticas; y la separación e independencia de los poderes públicos”. No hay democracia con presos y exiliados políticos. Carlos Sanchez Berzaín entrevistado por Jorge Camargo Rodríguez en BeniTv.