Experiencia de Bolivia y Nicaragua demuestra que no se puede pactar con el sistema dictatorial.

Bolivia sufre más de 14 años la dictadura de Evo Morales, incluso cambió su modelo institucional y su Constitución. La presidenta Añez perdió la oportunidad de reponer la vigencia de la República, se mantuvo con la constitución del Estado Plurinacional, cogobernó con los jueces y el sistema de la dictadura lo que llevó a un fraude colosal en octubre del 2020 y permitió el retorno del dictador. Ahora ha inventado la narrativa del golpe de Estado cuando lo que ocurrió fue un gran fraude electoral. Nicaragua es una dictadura desde el 2007, desde que regresa el sandinismo y vuelve a colocar el sistema dictatorial bajo el amparo del sistema castrochavista. Hoy, Nicaragua es reconocida como una dictadura, tiene miles de exiliados políticos. Bolivia y Nicaragua cometieron el mismo error: pactar con la dictadura, lo que permitió su regreso. La experiencia demuestra que no se puede pactar con el crimen organizado. Carlos Sánchez Berzaín entrevistado en «La hora de unidad democrática», por el Dr. Danilo Martínez.