La llegada de Vargas Llosa se politiza y se desata guerra verbal

Sánchez Berzaín dijo a EL DEBER que Morales teme al nobel peruano. Romero ve que hay una campaña de desprestigio

RUY D’ALENCAR  – rdealencar@eldeber.com.bo

Es la visita al país del premio nobel de literatura 2010 y, quizás, de uno de los críticos liberales más influyentes del mundo. Pero en pleno año de elecciones generales en Bolivia, la llegada del escritor peruano Mario Vargas Llosa es algo más que eso, tanto como para que el presidente y candidato del MAS, Evo Morales, diga que “viene para hablar en contra de Evo; enviado por (el exministro del MNR Carlos) Sánchez Berzaín” y que voceros del MAS aseguren que este arribo es parte de una estrategia de desprestigio internacional.

Suficiente como para que Óscar Ortiz, organizador de la visita y colaborador del candidato de los demócratas, Rubén Costas, gobernador de Santa Cruz, le responda “que el Gobierno de Morales no debería tener miedo a las ideas de Vargas Llosa” o que el presidente “queda mal ante el mundo al atacar al visitante por no respetar el pluralismo” de pensamiento.

Ortiz, que califica de falsedades los dichos del dignatario, ratificó que Costas recibirá en Santa Cruz al conocido crítico de los gobiernos de Cuba y Venezuela, quien para algunos analistas fue un apoyo decisivo para la campaña electoral de Ollanta Humala, que derrotó a Keiko Fujimori en las elecciones presidenciales de Perú, en junio de 2011. 

Pero el lío no acaba ahí. El exministro de Defensa de Gonzalo Sánchez de Lozada, Carlos Sánchez Berzaín, aludido por el mandatario, ha respondido que “el temor a Mario Vargas Llosa es el miedo a la verdad y a un respetado defensor de la libertad y la democracia”, y que cuando el presidente lo acusa a él es porque “está siguiendo instrucciones de campaña electoral que le dan sus asesores cubanos”, que le “tiene miedo” a un libro que publicó en EEUU con el título La dictadura del siglo XXI en Bolivia (2013), donde plantea que cualquier candidato de la oposición le ganaría al MAS si actúan unidos.

La respuesta del ‘Zorro’

La llegada del novelista y excandidato a la Presidencia de Perú, como se ha visto, ha generado una auténtica ‘guerra’ de acusaciones, cuando hay fuertes cuestionamientos al Tribunal Supremo Electoral (TSE) por no frenar campañas anticipadas y donde todos los temas son vinculados al cálculo electoral.

“La unidad de la derecha (…) es por instrucción de Gonzalo Sánchez de Lozada, mediante Sánchez Berzaín (…). Nuestros opositores repiten como loro lo que dice Sánchez Berzaín, de que soy dictador, soy autoritario, soy soberbio, por instrucción”, ha insistido ayer, ratificando que para él Vargas Llosa viene “para hablar mal” de su Gobierno.

Sánchez Berzaín, que durante el Gobierno de Goni era denominado el ‘Zorro’, negó tener relación con la visita de seis días del ‘escribidor’, sostuvo que Sánchez de Lozada está alejado de la política en EEUU y que le “encantaría hablar con líderes opositores bolivianos y también con los del Gobierno, pero como ya no hay democracia en Bolivia, como en toda dictadura, hasta hablar es delito”.

“Él (presidente Evo Morales) pudo mostrarse como un líder plural y darle la bienvenida (a Vargas Llosa), y no temerle a sus ideas”, lamentó Ortiz, para quien  la visita del nobel al país y al gobernador cruceño no debería tomarse como cosa política

Reaparece el gonismo

Un fantasma recorre Bolivia

1  El MNR, al frente. El jefe nacional de los rosados, Érik Morón, negó recibir instrucciones de Sánchez Berzaín o de Goni. Asimismo, dijo que hay dos clases de bolivianos: “Los perseguidos y los que estamos en Bolivia, como el MNR”.

2  Sorpresa. El jefe de UN, Samuel Doria Medina, se sorprendió ayer al enterarse de la visita del peruano a Bolivia y dijo que buscará contactarse.

3  Agradado. El exministro de Goni Carlos Sánchez Berzaín sonrió y hasta se mostró agradado e irónico por los comentarios de Morales sobre él. “¡Qué maravilla!”, dijo.

4  Goni. “Sánchez de Lozada está alejado de la política y la última vez que lo vi fue en diciembre, cuando le regalé una copia autografiada de mi libro que me prometió leería con interés”, sostuvo.