Respuesta de Sánchez Berzaín a Raúl Peñaranda

Para encubrir a Mesa, Peñaranda calumnia nuevamente a Sánchez Berzaín.

Con el título «Las confesiones de Sánchez Berzaín” en columna de Página Siete, Raúl Peñaranda Undurraga tergiversa, calumnia e injuria de nuevo a Carlos Sánchez Berzaín.  Lo hace por segundo año como amanuense y defensor de Carlos Mesa.  El 16 de septiembre de 2012,  en el editorial ”Sánchez Berzaín y la distorsión de los hechos”, Peñaranda defendía «una serie de destempladas acusaciones contra autoridades del Gobierno y el expresidente Carlos Mesa”. La respuesta fue «Sánchez Berzaín y el esclarecimiento de los hechos” (Sep.21.2012), que probó la mala fe y la violación a la ética de prensa; recibió diez preguntas que nunca ha contestado.

Ahora Peñaranda recurre nuevamente a la calumnia y la injuria, a partir -dice- de una entrevista de E. Serres, en el programa No Mentirás (Serres se retiró en febrero de 2012 y luego llegó Jimena Antelo).  El calumniador se pone en evidencia desde las primeras líneas adjetivando: «ladrarnos sus ideas…la verdad es que ladra bastante bien”. Luego vomita falacias de economía, estudios, ejercicio profesional y del derrocamiento de octubre de 2003.
Peñaranda miente de principio a fin: no viví infancia ni juventud en la pobreza, gracias a Dios mi familia siempre tuvo trabajo honesto y patrimonio, costeó mis 12 años de estudio en La Salle de Cochabamba (abanderado el año 1976); abogado a los 22 años, después de trabajar cinco años en un importante bufete; no atendí nunca asuntos de narcotráfico, mi ejercicio fue civil, comercial, penal y constitucional. Emplazo al calumniador a que revise expedientes públicos y encuentre un solo caso de narcotráfico atendido por Sánchez Berzaín; que investigue  si exclientes míos (…),  honorables personas, familias y empresas, merecen la criminal irresponsabilidad de las frustraciones de Peñaranda. Si además revisa el arancel mínimo de honorarios, el número de causas que yo patrociné, contratos, empresas,  horas de cátedra, acciones, entenderá que «antes de entrar a la política yo era un hombre de fortuna”, declarada en detalle como ministro de la Presidencia a mis 33 años en agosto de 1993 ante la Contraloría General. Pero  el éxito es delito para mediocres como Peñaranda.
Como siempre vivo de mi trabajo. Tengo tres títulos profesionales: abogado, politólogo y sociólogo. UMSS/CSJ 1982; F.I.U. Agosto 9. 2008 Master of Arts in Political Science Cum Laude; Flacso Costa Rica. Marzo 4.2011 Magister en Ciencia Política y Sociología; The National Scholars Honor Society 2007 Lifetime Membership. Soy catedrático universitario, analista político, consultor, «exiliado político” por la felonía de Mesa y la dictadura de Morales. Pero Peñaranda mide el trabajo ajeno con la ineptitud que lo ha llevado al desempleo.
Sobre octubre 2003. «Resistiendo más fuertemente” era defender la democracia y el estado de derecho, no la violencia que falsamente se imputa a los derrocados. Y más preguntas a Peñaranda: ¿ya averiguó cómo Evo y Mesa derrocaron el 2003 y se encubren ahora? ¿Ya sabe quiénes iniciaron los hechos de violencia? ¿Investigó cuánto y qué pidió y cobró Carlos Mesa para ser  candidato el 2002? Pese a sus calumnias destinadas al asesinato de la reputación de Carlos Sánchez Berzaín, para restarle credibilidad (como estrategia «mediática” de Mesa), más pronto que tarde se aceptará la verdad: Carlos Mesa (…) y Evo Morales (…).
Finalmente, gracias Peñaranda Undurraga. El libelo que obliga esta respuesta es su reconocimiento «paranoico” de la «alter  nativa política” para devolver la democracia a los bolivianos. Ya cesará su impunidad amparada por la justicia sometida.
Carlos Sánchez Berzaín

Nota del Editor

Página Siete publica la respuesta del señor Carlos Sánchez Berzaín a Raúl Peñaranda -pese a los adjetivos que utiliza para descalificar al autor del artículo y a que en su texto involucra a personas que no fueron mencionadas por el columnista- en estricta aplicación del derecho a réplica que le asiste al exministro. El señor Sánchez Berzaín ha  proporcionado una larga lista de personalidades y empresas a las que dice haber asesorado y brindado servicios profesionales a lo largo de su carrera, que no podemos reproducir por razones de espacio. Asimismo, nos hemos visto obligados a suprimir tres adjetivos calificativos con los que se refiere al presidente Evo Morales y al expresidente Carlos Mesa en razón de las normas éticas que rigen el trabajo de este periódico.